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Este piso en Sant Just se transforma en un oasis de estilo y comodidad con una atención meticulosa al diseño. El mobiliario a medida se convierte en la pieza central, fusionando funcionalidad y estética con toques nórdicos que añaden calidez y simplicidad. El recibidor sorprende con un diseño único, marcando la pauta para el resto del hogar. El salón cobra vida con un papel pintado de palmeras, una decisión inspirada y llevada a cabo por la visión de la clienta. La naturaleza se encuentra con el diseño interior en este espacio luminoso y acogedor. El baño, en contraste, adopta un enfoque clásico y atemporal con una bañera como pieza central. Esta amalgama de estilos, desde el mobiliario nórdico a medida hasta el papel pintado temático, crea un hogar único que refleja la personalidad y las preferencias de la clienta, convirtiendo cada rincón en una expresión de su gusto distintivo.